LA CIUDAD

Industrial y turística, moderna y celosa de sus tradiciones, con el mar al lado y las palmeras impregnando cada uno de sus rincones, la vida en Elche es agradable y laboriosa, como sus gentes. Por su ubicación, en pleno arco del Mediterráneo, ha sido desde antiguo pieza codiciada de pueblos venidos de otras tierras, que fueron dejando sobre su suelo un importante legado, del que hoy disfrutamos.

Un verdadero mar de palmeras integrado en la ciudad, que conforma un paisaje único en Europa: esa es la primera e irrepetible sensación que se experimenta al llegar. Este equilibrio se ha mantenido durante siglos gracias al tesón de los ilicitanos, lo que ha permitido que cuente con un patrimonio natural y cultural de primera magnitud. Prueba de ello es el entorno del Camp d’Elx, que rodea la urbe, todo un ejemplo de conservación de un modo de vida muy singular.

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MUÉVETE

Elche está conectada con el resto del litoral mediterráneo y Europa por la autopista A-7 (itinerario europeo E-15). Otra de las vías fundamentales para los viajes de larga distancia es la autovía N-330 de la red básica del Estado que comunica la provincia de Alicante con el centro de la Península. Además, existe una red de vías que complementa las anteriores como son la N-340, que discurre entre Alicante, Elche y Murcia por Orihuela y por otro lado la costera N-332, que une el litoral ilicitano con otros espacios turísticos. Recientemente se puso también en marcha la autopista Alicante-Cartagena (A-32) que conecta Elche con ambas ciudades.

Elche está situada en un punto intermedio de la línea cercanías que une Alicante y Murcia y que dispone de una alta frecuencia de viajes que facilita la conexión desde cualquier punto de la geografía española. La vía férrea, que cruza la ciudad mediante un trazado subterráneo, cuenta con dos estaciones de pasajeros en el casco urbano y un apeadero en la pedanía de Torrellano.

En breve la finalización de la construcción y puesta en marcha de la estación AVE en Elche, reforzará de una forma muy importante las comunicaciones con la ciudad.

Una moderna estación de autobuses, ubicada junto a la estación del ferrocarril, cuenta con líneas regulares tanto a las poblaciones cercanas como a las capitales nacionales e internacionales más importantes.

Elche también dispone de excelentes comunicaciones gracias al aeropuerto Alicante-Elche, situado dentro del término municipal, la autopista A-7, el cercano puerto y la conexión ferroviaria.

También, el servicio de autobuses urbanos recorre toda la ciudad y, por supuesto, siempre puedes hacerlo en bici con el servicio de alquiler de bicicletas LLobi, o a pie, ya que la mayoría de los recursos y atractivos turísticos de la ciudad se encuentran en el centro de Elche, con multitud de calles peatonales que invitan a recorrerla.

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PATRIMONIO MUNDIAL

No hay ninguna ciudad española que cuente con tres bienes inscritos en las diferentes categorías de Patrimonio Patrimonio Mundial de la Unesco. En este aspecto Elche es definitivamente única.

Palmeral

El Palmeral Histórico de Elche es un paisaje cultural único, de valor excepcional y significación universal. Es un legado cultural vivo de Al-Andalus, la España musulmana medieval. Constituye un extraordinario exponente de sostenibilidad en el desarrollo agrícola de ecosistemas frágiles. Además, posee un rasgo característico que lo hace diferente del resto de los palmerales del mundo, a saber: “la palma blanca”, una reliquia viva de la cultura de la palmera del Mediterráneo antiguo.

El primer reconocimiento llegó en el año 2000, cuando el Palmeral histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad. Se premiaba así no sólo la labor de nuestros antepasados, dando vida a ese palmeral que ahora nos configura, acompaña y enriquece; sino a las ilicitanas e ilicitanos que, a lo largo de los siglos, han sabido conservarlo como parte indisoluble de su forma de ser, incluso más allá de su rentabilidad económica como cultivo.

La palmera es, en Elche, un bien sagrado. La recompensa hacia esa convicción es un devenir cotidiano envuelto y custodiado por su amorosa sombra.

Misteri d’Elx

Un año después, en 2001, se creó en la Unesco la categoría de Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad. Y el Misteri, o Festa d’Elx, tuvo el sin duda merecido honor de ser la primera manifestación festiva española que figuró en ella.

Junto al palmeral, la Festa es nuestra otra seña de identidad. Tenemos aún una tercera (trilogía mítica donde las haya), la Dama de Elche, que ostenta el raro privilegio de bilocarse, es decir, estar en dos sitios a la vez: en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid y en el corazón de todos los ilicitanos, sin excepción.

Museo Escolar de Puçol

Este singular espacio museístico, cuyo nombre completo es “Centro de Cultura Tradicional Museo Escolar de Puçol”, pasó a formar parte en 2009 del Registro de Prácticas Ejemplares, cuyas inclusiones decide el Comité para la Salvaguarda del Patrimonio Inmaterial de la Unesco.

Se reconoce así internacionalmente la cuidadosa, intensa y esforzada labor de quienes, desde finales de los años sesenta del pasado siglo, tuvieron siempre muy claro que para mirar al futuro es imprescindible conocer quiénes somos y de dónde venimos.

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CULTURA

En la ciudad que vio nacer a la Dama, un recorrido por las calles y plazas del centro histórico de Elche permite descubrir la combinación de construcciones nobles y monumentales (basílica de Santa María, alcázar de la Señoría, torre de la Calahorra, convento de la Merced y Ayuntamiento, entre otros), testimonio de un rico pasado, con los edificios propios de una ciudad joven y dinámica. Esta riqueza arquitectónica se complementa con una red de museos cuyos contenidos son de indudable atractivo para el visitante.

La estratégica situación del primitivo emplazamiento de la ciudad en La Alcudia, dos kilómetros al sur de la actual urbe, marcó su historia. Por ella pasaron varias civilizaciones, cuya huella pervive en su museo y parque arqueológico. Los restos de la cultura neolítica muestran la presencia de asentamientos humanos ya desde cinco mil años antes de nuestra era.

Iberos, romanos y árabes

Los períodos ibero y romano (siglos V a. C. al II d. C.) son los de máximo esplendor en la antigua ciudad, con grandes edificaciones, templos y profusión de esculturas, como la Dama de Elche. Probablemente se convirtió en un foco cultural y religioso del territorio circundante, que recibía a su vez la influencia del Mediterráneo desde el cercano puerto (Portus Ilicitanus, en la actual Santa Pola). Durante la etapa como colonia romana, Ilici llegó a emitir su propia moneda.

Tras varias incursiones de francos, germanos y bizantinos, la ciudad entra en un período de dominación de la población hispano-romana por parte de la cultura visigoda, adquiriendo nueva relevancia. Llegó a tener obispado propio.

Entre los siglos IX y X, los árabes procedentes de Egipto fundan una nueva villa, Ils, dos kilómetros al norte de la anterior, junto al cauce del río, y la protegen con una muralla, de la que aún se conserva su principal torre, La Calahorra. La actividad comercial y económica vive una etapa de esplendor, gracias al desarrollo de la agricultura. Muestra de este bienestar son los Baños Árabes del siglo XII, que se pueden visitar en el centro de la ciudad. El Museo Arqueológico y de Historia de Elche (MAHE) ofrece al visitante una amplia panorámica de los avatares de la urbe, tanto en su antiguo emplazamiento como en el actual, enriquecida con elementos interactivos.

Palmeral, Patrimonio de la Humanidad

El grandioso palmeral, una de las herencias de los cuatro siglos de presencia árabe, es el símbolo inequívoco de la ciudad, que ha sabido luchar por sacar partido a la tierra frente al sol implacable y la escasez hídrica. El uso del agua, su distribución y aprovechamiento ha sido una constante en el paisaje ilicitano, que sigue empleando una red de acequias, partidores, ramales y saltos de agua que datan de la época islámica. Todo ello fue determinante para la declaración del palmeral como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

El Museo del Palmeral proporciona al visitante la oportunidad de conocer un huerto de palmeras con su sistema de regadío tradicional, cultivos típicos y la artesanía de la palma blanca. El Centro de Cultura Tradicional Museo Escolar de Puçol recoge la memoria de los habitantes del campo y de la ciudad, a través de muestras de antiguos oficios, trabajo rural, comercio, ocio y costumbres que han dado forma a la vida y el devenir de las pedanías del campo de Elche y de la propia ciudad durante el siglo XX.

El Museo de Arte Contemporáneo (MACE), en plena plaza Mayor del barrio del Raval, ofrece una amplia y variada panorámica del arte vanguardista español de las últimas décadas del pasado siglo. En el mismo barrio se puede realizar un viaje al pasado más remoto en el Museo Paleontológico (MUPE), donde se muestran fósiles hallados en la zona, junto a huesos y reconstrucciones de esqueletos de grandes saurios, como el temible T-Rex.

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FIESTAS

El Misteri, o Festa d’Elx, declarado por la Unesco en 2001 Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad, encabeza, en agosto (la fecha principal es el 15, día de la Virgen de la Asunción), el riquísimo y arraigado calendario festivo ilicitano. En diciembre se conmemora, con la Venida de la Virgen, el origen legendario de la Festa: la imagen sagrada llegó por mar en un arca que contenía, además, el consueta para llevar a cabo las representaciones estivales. El guardacostas Francesc Cantó, que hoy sigue corriendo montado sobre su caballo para anunciar la buena nueva, fue el autor del hallazgo en la playa del Tamarit.

Otros hitos fundamentales son el Domingo de Ramos, con miles de palmas blancas -procedentes del palmeral y del minucioso trabajo de manos artesanas- acompañando el paso de la Entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, conocido popularmente como la burreta; y el Domingo de Resurrección, cuando se lanzan sobre la imagen de Jesús Resucitado y, muy especialmente, de la patrona, la Virgen de la Asunción, millones de papelillos de colores, llamados aleluyas, que dan nombre a la procesión.

En agosto también, además de los Moros y Cristianos, que rememoran la conquista de la ciudad por las tropas del rey Jaime I en 1265, la Nit de L’Albà (fiesta declarada de Interés Turístico de la Comunidad Valenciana) en la noche del 13 y la Nit de la Roà, en la madrugada del 14 al 15, acompañan las representaciones del Misteri.

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NATURALEZA

Los 326,5 kilómetros cuadrados del amplio término municipal de Elche ofrecen al visitante una gran variedad de paisajes, hábitats, fauna y flora, distribuidos en tres ecosistemas: los montes y lomas que conforman las sierras del interior del municipio, los conjuntos dunares del litoral y los típicos humedales costeros mediterráneos que se desarrollan entre ambos espacios.

Los humedales ilicitanos constituyen uno de los conjuntos más relevantes de la Comunidad Valenciana y uno de los últimos vestigios de los numerosos marjales (también llamados saladares) pantanosos existentes en su franja litoral. Tan solo la Albufera de Valencia supera en importancia ecológica y ornitológica al parque natural de El Hondo, que comparten Elche y Crevillent.

El Clot de Galvany, integrado en el conjunto de humedales de la pedanía de Balsares y conectado con el sistema dunar de Arenales y Carabassí, constituye otro de los elementos destacables del rico patrimonio medioambiental ilicitano.

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PLAYAS

Tres mil horas de sol anuales sobre nueve kilómetros de arena fina y blanca.

Seis extensas playas, en su mayor parte vírgenes, forman el litoral ilicitano, dividido en dos por el término municipal de Santa Pola.  Al norte, en las playas de El Altet, Arenales del Sol y El Carabassí las dunas de arena fina son las protagonistas, mientras que en el sur, en las playas de El Pinet, La Marina y Les Pesqueres-El Rebollo se suman también sus extensas pinadas.

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DEPORTE Y SALUD

Grandes eventos, como numerosos encuentros de la Selección Española de Fútbol, etapas de la Vuelta Ciclista a España, la III Copa del Mundo de Frontón, el Campeonato del Mundo de tiro al plato de 2010, el Torneo Internacional de Balonmano de Torrellano, La Media Maratón más antigua del mundo, pruebas de ultrafondo como la “Transilicitana”, así como la gran trayectoria del equipo de fútbol sala Femesala, siete veces campeón de liga, dan fe de que Elche es una ciudad volcada con el deporte.

Atletismo, BTT, deportes náuticos, fútbol, golf, natación, pádel, squash, marcha nórdica, tenis y tiro al vuelo y olímpico configuran la amplísima propuesta de turismo deportivo en la ciudad, el campo y las playas de Elche.

Elche, el Oasis Mediterráneo, un lugar para encontrar el descanso a través de experiencias y sensaciones para alcanzar el mayor estado de bienestar en sus diferentes instalaciones con servicios de Spa & Wellness.

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ACTIVO Y DIVERTIDO

-Avistar aves (birdwatching) en los parques naturales de El Hondo y Las Salinas, así como en el espacio natural del Clot de Galvany.

-Bucear en los riquísimos fondos marinos de la costa ilicitana.

-Caminar por los huertos de palmeras (existe una señalizada Ruta del Palmeral y un sendero del Palmeral -PR-CV 439-), los pinares de algunas de sus playas y los parques y espacios naturales.

-Disfrutar y descargar adrenalina en el Parque Multiaventura más divertido de la provincia en un entorno mágico rodeados de palmeras.

-Volar en globo sobre la inmensidad de los palmerales, las playas y los humedales.

-Patinar sobre hielo en una de las dos únicas pistas de hielo existentes en la Comunidad Valenciana.

-Compartir una jornada con leones marinos, guacamayos y jirafas en Río Safari, especializado en la cría y cuidado de animales exóticos.

-Acción y diversión en los diferentes establecimientos de paintball, láser y archery tag que hay en la ciudad.

-Suspense, ingenio, habilidad, tiempo, equipo, resuelve el misterio y descubre la salida en diferentes “escape room” de Elche.

-Rutas, circuitos por la naturaleza y entrenamientos de Nordic Walking.

-Y, para los más pequeños, vivir apasionantes aventuras de la mano del simpático personaje Ili Palmir.

¿Quién puede resistirse a tantas, tan diferentes y tan activas tentaciones?

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GASTRONOMÍA

Además de su gran riqueza cultural, Elche ofrece una excelente gastronomía, en la que se emplea la gran variedad de productos que ofrece la zona. Una rica huerta y la proximidad de la costa marcan la historia culinaria de la población. El plato más conocido de la cocina ilicitana es el Arroz con Costra, aunque también hay que destacar el Arroz con Conejo y Caracoles y sin olvidar el tradicional Puchero con Pelotas. También es muy apreciado el Mujol del Hondo con all i oli y el marisco del litoral.

De los postres hay que destacar los frutos de la tierra (dátiles, higos, granadas…) como también la Tortada de Elche o el Pan de higo. Entre las bebidas tradicionales encontramos el destilado de la flor de cantueso, el anís de paloma (el popular “Nugolet”) y el Licor de Dátil.

A la hora de buscar un lugar donde saborear las maravillas gastronómicas de la cocina ilicitana, la ciudad ofrece muchas oportunidades, tanto en el casco urbano como en las inmediaciones, en el campo de Elche. El visitante dispone de una amplia oferta de restaurantes que abarcan la cocina mediterránea tradicional de la zona, la cocina internacional y la más moderna cocina de autor. Y si lo que desea es ir de tapas, hay interesantes lugares donde saborear los productos más exquisitos.

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CONGESOS Y REUNIONES

Facilidad de transportes, buena planta hotelera, variedad en la oferta gastronómica e instalaciones modernas para reuniones y conferencias es lo que le pedimos a una ciudad de congresos. Eso, y mucho más, es lo que ofrece Elche, con multitud de posibilidades: desde una gran feria o exposición en IFA (Institución Ferial Alicantina) hasta una reunión más reducida en un céntrico hotel o en pleno parque empresarial, pasando por las modernas instalaciones del Centro de Congresos, en el casco urbano y rodeado por el palmeral.

La Institución Ferial Alicantina (IFA) es una gran superficie multifunción destinada al turismo de negocios y, especialmente, a la celebración de grandes ferias comerciales, situada junto al aeropuerto internacional de Alicante-Elche y a unos 8 kilómetros de la ciudad.

La universidad Miguel Hernández (UMH) está dotada de infraestructura para la organización de congresos y cuenta con unas completas instalaciones deportivas. Su localización y accesibilidad son óptimas, a apenas diez minutos andando del centro urbano y frente a las estaciones de autobuses y de tren.

Oferta hotelera

El céntrico hotel Huerto del Cura ofrece la posibilidad de realizar congresos en un espacio exótico, único y diferente: un auténtico bosque de palmeras envuelve este complejo hotelero. Cuenta con 14 salas modulares, con capacidad de acoger hasta 850 personas.

En el hotel Port Jardín Milenio, en pleno palmeral y a escasos minutos del cogollo urbano, se pueden celebrar congresos en un ambiente tranquilo y acogedor. Dispone de salas para reuniones de hasta 250 personas.

Con diferentes salones de reuniones y congresos, capaces de albergar a 150 personas, el hotel Port Elche, en Elche Parque Empresarial, tiene el valor añadido de la cercanía a las empresas y servicios del moderno parque industrial.

En el hotel Areca, situado en la pedanía de Torrellano, a 2,5 kilómetros de Elche Parque Empresarial y a tres del aeropuerto internacional de Alicante-Elche, es posible realizar congresos con capacidad para 80 personas.

El polígono industrial de Carrús, dentro del casco urbano, acoge el hotel B&B, idóneo para pequeñas reuniones de empresa, situado en un eje industrial y a escasos metros de la autovía del Mediterráneo.

Elche Convention Bureau

El Elche Convention Bureau está integrado dentro de Visitelche. Se encarga de la promoción de Elche como sede de congresos, convenciones y viajes de incentivo. Con su trabajo, acerca las amplias posibilidades de Elche y su variada oferta para el turismo de negocios al entorno empresarial nacional e internacional.

También facilita la realización de congresos, aportando ayuda logística a las empresas y organizaciones que desean venir a la ciudad, haciendo de nexo de unión con hoteles, agencias de viajes, asociaciones, organismos públicos y demás agentes implicados.

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EN FAMILIA

Elche, además, reúne muchos requisitos para que viajar con niños sea una experiencia extraordinaria. Disfrutar de unos días inolvidables en familia precisa de actividades que gusten tanto a niños como a padres. Por ello, la ciudad ofrece una variada oferta para todos los públicos y concretamente productos creados especialmente para los más pequeños, llegando a conseguir que disfruten al mismo tiempo que aprenden y desarrollan sus habilidades.

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