
En León las tapas se han convertido en una clara seña de identidad de la cocina local y, por lo tanto, en un motivo más que suficiente para visitar la ciudad y disfrutar de todo su sabor.
Además de las tapas, la cocina leonesa tiene otro pilar en unos fogones que han sabido sacar, desde siempre, el mejor partido a los excelentes productos de la tierra.
La calidad y cantidad de materias primas de primerísima calidad que se producen en la ciudad y su entorno ha permitido crear, a fuego lento, un recetario que no tiene desperdicio.
Y precisamente sobre esa despensa y ese recetario, las manos expertas que trabajan tras los fogones leoneses se encargan de hacer realidad todo tipo de maravillas culinarias, desde lo más tradicional hasta las nuevas propuestas de la vanguardia gastronómica; de esos ricos platos de cuchara que ayudan a sobrellevar el frío invierno leonés al uso de nuevas técnicas que permiten reinterpretar todos esos ingredientes con mucha solera.
De tapas, de vinos (no nos olvidamos de las dos Denominaciones de Origen, la D.O. León y la D.O. Bierzo) y de fogones, de manos expertas, de recetas de ayer y de hoy, de los mejores productos de la tierra, León es, en cualquier caso, un auténtico placer para los sentidos. ¡Planifica ya tu visita en nuestra web!