“En un lugar de La Mancha de cuyo nombre sí quiero acordarme…” Vale, hemos cambiado el inicio de El Quijote, pero cuando visites Ciudad Real entenderás por qué merece la pena recordarlo todo. La localidad, escenario de buena parte de las aventuras del Ingenioso Hidalgo, destila la herencia de Cervantes por sus calles, plazas y monumentos. Aquí te mostraremos algunos de sus puntos de interés, aunque lo mejor es que vayas a vivir la avexperience por ti mismo. ¡Comenzamos!
Un agradable paseo por la historia
Empezamos nuestro paseo a unos ocho kilómetros del centro de Ciudad Real. Allí se ubican, junto al Río Guadiana, el Parque Arqueológico de Alarcos y la Ermita de Alarcos. Los primeros asentamientos se produjeron en este lugar, por lo que se han hallado restos desde la Edad del Bronce hasta la Edad Media, pasando por las épocas romana y visigoda. Puedes pedir una visita guiada y te detallarán todas las civilizaciones que dejaron sus huellas.
Dentro del mismo conjunto arqueológico se ubica la Ermita de la Virgen de Alarcos, de estilo gótico. En este santuario se celebra la tradicional Romería de Alarcos. El templo se convierte además en el mes de julio en escenario para el Festival de Música Antigua y Medieval.
Ya en el centro de la ciudad encontramos los restos de la muralla y las puertas. Junto a la Ronda de la Mata se conserva en la actualidad un tramo de la fortificación original. Además, también se mantienen en pie la Puerta de Santa María, la Puerta de Toledo y la puerta del Torreón del Alcázar, construido para vigilar los posibles ataques a la Villa.
La gran belleza del triángulo gótico
Ciudad Real presume del llamado triángulo Gótico. Lo encabeza la Catedral de Santa María del Prado, que cuenta con una sola nave y en cuyo interior destaca el impresionante retablo del Altar Mayor. El segundo templo es la Iglesia de San Pedro, que alberga la capilla de Fernando de Coca, confesor de Isabel La Católica. Más de uno se preguntará cuántos secretos se llevó a esa tumba.
Cierra el tridente gótico la Iglesia de Santiago, en cuya visita se te irá la cabeza… hacia arriba, ya que su techo luce un llamativo artesonado mudéjar. Otros templos de interés para visitar son el Convento de las Carmelitas Descalzas, de estilo renacentista y barroco, el Antiguo Convento de la Merced y la Ermita de los Remedios.
Las ‘cajas’ de tesoros de Ciudad Real
Ciudad Real cuenta con media docena de museos para visitar. Quizá el más llamativo sea el Museo del Quijote- Biblioteca Cervantina. Se trata de un lugar dedicado a la figura del Ingenioso Hidalgo. Combina exposiciones de obras de arte relacionadas con la novela con llamativos montajes multimedia. Además, los estudiosos de la literatura tienen allí una gran biblioteca centrada en la vida y obra del escritor Miguel de Cervantes.
Seguimos de visita y llegamos al Museo de Ciudad Real, que se divide en dos secciones. Por un lado está la colección de paleontología, compuesta por restos fósiles; y por otra, la de arqueología, que cuenta con piezas de excavaciones de toda la provincia. Por otra parte, el Convento de la Merced alberga pinturas y esculturas de los siglos XVI al XVIII, así como una muestra de arte contemporáneo español. La entrada para ambos museos se adquiere de forma conjunta.
Elisa Cendrero, ilustre dama de la alta burguesía, cedió su casa familiar y sus colecciones para que éstas se convirtieran en Museo. Además del mobiliario, contiene una importante colección de cuadros, armas blancas, abanicos y cerámica. También se puede visitar el Museo López-Villaseñor, con obras de este pintor ciudadrealeño que destacó en la segunda mitad del siglo XX. Por último encontramos el Museo Diocesano, que recoge obras de arte religioso desde el periodo románico hasta el siglo XX.
Lugares que tienes que visitar sí o sí
La Plaza Mayor es el corazón de Ciudad Real. Tanto en sus laterales como en las calles anexas se ubican decenas de comercios y bares. Además, allí encontramos dos de los edificios más singulares. A un lado, la Casa del Arco, que fue sede del antiguo Ayuntamiento y que ahora expone el Reloj Carrillón. De él se asoman en determinados momentos recreaciones de Cervantes, Sancho Panza y Don Quijote, que marcan la hora en punto al son de una melodía.
Bajo la atenta mirada de la estatua de Alfonso X, frente a la Casa del Arco, se sitúa el Ayuntamiento de Ciudad Real. Un edificio construido con una marcada inspiración neogótica. Con una llamativa estética, varios pináculos coronan su fachada. Otros lugares de interés destacados son: el Palacio de la Diputación, el Antiguo Casino, la Casa de la Misericordia, el Palacio de Medrano y la fachada de la Casa Conde de la Cañada.
Un auténtico museo al aire libre
El Parque de Atocha, los Jardines del Prado, El Torreón o La Atalaya son algunos de los espacios verdes con los que cuenta Ciudad Real. Pero, sin duda, la joya de esta corona es el Parque de Gasset. Este espacio cuenta con tres recorridos: uno dedicado a los árboles singulares, un segundo que se detiene en monumentos y esculturas y un tercero que se recrea en las fuentes ornamentales.
La vegetación se funde con las figuras artísticas en este pulmón verde, destacando los bancos de cerámica con escenas de El Quijote o la Cruz de los Casados. Según la leyenda, esta escultura inmortaliza el trágico final de la historia de amor de dos descendientes de familias enfrentadas.
Las esculturas son recurrentes en las calles y plazas de Ciudad Real. Personajes históricos, personalidades relacionadas con la cultura y las fiestas y, sobre todo, con el mundo cervantino se reparten por el callejero invitando al turista a tomar una foto e incluso algún que otro “selfi”.
La tradición se saborea en la mesa
Antes de nada, destacar que en Ciudad Real cuando pides una bebida, te invitan a una tapa. Aparte de eso, el queso y el vino son de cata más que obligatoria. También deberías probar los guisos con carne de caza y cordero. Y entre las recetas tradicionales, las Migas del Pastor, el Tiznao Manchego y los Duelos y Quebrantos. Para acompañar, el Pan de Cruz, típico de la zona. Por último, de postre, tarta de queso o pan de calatrava. ¡Buen provecho!
La localidad también es sede de encuentros gastronómicos, entre los que destacan las Jornadas de Cocina Alfonsí, dentro de la Semana Histórica; la Feria del Vino; el concurso de tapas Tapearte; el Encuentro de Pasiones con dulces, tapas, raciones y platos especiales de vigilia, o la reciente ruta del Puchero Carnavalero.
Y que no pare la fiesta
La fiesta más destacada es La Pandorga, que se celebra el 31 de julio. El acto principal consiste en un desfile con trajes regionales, encabezado por las figuras de El Pandorgo y La Dulcinea, que acaba en la Catedral. Allí se realiza una ofrenda de flores a la patrona, la Virgen del Prado. A este acto tradicional se le suman toda una serie de actividades como conciertos, espectáculos infantiles o degustaciones.
También son festividades destacadas el Domingo de Piñata en Carnaval, la Semana Santa, los Mayos, la Romería de Alarcos, el Corpus Christi y la Feria de Agosto, con su famoso «Baile del Vermú».
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